lunes, noviembre 21, 2005

A quién le importa

En esta foto está mis dos perritos, el Master (nombre super original) que es el de color más claro y el Aurelio (que en un comienzo era Aurelia) el que es más oscuro, el Aurelio es mío pero al final es como si fueran de propiedad común. Los dos tienen una forma bien especial de demostrar su cariño, son algo torpes, jugetones y no controlan sus fuerzas, pero con sus cariños uno sabe que la reconocen y quieren.
Este fin de semana pasaron algunas cosas que aún me tienen algo desconcertada, supe de algunos comentarios que andan en Sauzal de mi relación con Hugo y eso me pone algo triste, las cosas eran buenas, pero no se puede negar que han cambiado y mucho, ya no se puede actuar con la misma libertad de antes, aún existe desconfianza. Creo que hace unos días mencioné que se casa el AD, y me alegro por él, y ese mismo día dije que nosotros pensamos casarnos en febrero pero que no se puede, no tanto porque se casen los chiquillos, sino que aún no están las cosas listas, nuestras finanzas...no sé... aún falta preparar muchas cosas, pero igual aún queda gente (aparte de mi mamá que le contó en la escuela a todo el mundo que me casaba en febrero :P) que se preocupa de mencionar que me caso, pero que ni siquiera se ha preocupado de preguntarnos (al menos a mi no). Lo más que molesta es que existe una constante necesidad de comentar cosas y meterse en asuntos que no nos competen, digo nos porque yo también lo he hecho más de alguna vez, pero obviamente molesta mucho. Ojalá las cosas cambien.
También aprendí que la frase que dice que "se ven caras pero no corazones" es muuuuy cierta, quisiera que si alguien está desconfiando de mí o siente que la(lo) estoy molestando me diga, a veces uno hace las cosas de buen corazón y se mal interpretan. Este último tiempo me han pasado muchas cosas, me hicieron mucho daño, me sentí sola como nunca (hablando de soledad de personas, no de Dios), muchos se lavaron las manos y hoy en día, aparezco como la culpable de algo de lo que prácticamente siempre fui víctima, yo no tengo culpa que cosas que hagan otras personas afecten a los demás, yo sólo me responsabilizo por lo que hago o digo, por nada más. Ah... si alguien tiene que decirme o preguntarme algo, que lo haga directamente, no me gustan los comentarios malintencionados, me gustan las cosas de frente y con sinceridad, no me escondo para decir lo que siento.
Además, cada día conozco más a las personas que me rodean y esmuy difícil rodearse de las personas correctas, todos de una u otra manera nos fallan (y les fallamos también), la idea es reconocer nuestros errores y no volver a cometerlos. Por su sinceridad es por lo que quiero a mis pellitos.
Piénsenlo, si tuvieramos claros nuestros sentimientos las cosas funcionarían mucho mejor.
Xau
MaJo

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