domingo, noviembre 18, 2018

Limonada o Tequila?

No sé qué ha sido peor....si sentir que perdí tanto tiempo, que perdí tanta dignidad o pensar que las cosas eran evidentes y yo no quería verlas.

Hoy observo con detención y no me gusta lo que veo y me entristece, creo que por el tiempo perdido, el daño hecho...a todos, y las oportunidades que le quité, y que perdí.

Veo que tengo a mi disposición una gran oportunidad...de poder ser realmente feliz, pero no puedo soltar ¿Por qué? Supongo que por ego o por obsesión, no con la persona, sino con el significado que tiene para mi ser una familia, sin poder mirar lo que viene a futuro.

El otro día mi hermano me preguntó en serio crees que él se merece una mujer como tú? Una familia contigo y tus hijos? La respuesta es más que obvia, entonces?

Qué estoy esperando?
No sé...en serio que no lo sé. De lo único q estoy segura es que no nos merece, que no nos cuidó, no nos respetó, su palabra y su compromiso no valen nada, y sobre todo estoy segura que no es allí donde quiero estar.

Generalmente he buscado justificaciones a sus acciones....ni siquiera me atrevo a decirlas, son vergonzosas. Pero en una predicación escuché....ese sol negro, ese sol negro te reventó la vida, y no le importó, nunca le ha interesado. El tema es que no es sólo a mi, indirectamente dañó a los hijos. Es eso justificable? La respuesta también es obvia.

Finalmente como dicen por ahi: Cada quien está donde quiere estar y pierde lo que quiere perder. He aquí un claro ejemplo, qué más necesito? Soy realmente una estúpida

La vida me dio limones....muy ácidos. Tengo que decidir qué hago con ellos ¿Limonada? ¿o elijo un tequila y me embriago? Lo segundo no vale la pena, ahora sólo queda por definir a qué vamos ahora. Y aguantar el tiempo que falta por el divorcio....la verdad es que el tiempo pasa demasiado lento.

Tengo q poner pautas, límites o ni siquiera regresarme? La verdad es que quisiera que el sólo se diera cuenta cual es su lugar....pero sería mucho pedir, últimamente lo único por lo que lucha son sus propios intereses. Qué me queda? Darme yo mi lugar, limitar mi espacio, cortar la relación afectiva, no es mi amigo, no es mi esposo, sólo es el padre de mis hijos....no luchó por nosotros, es más abrió la oportunidad para que cualquier otro hombre tome su lugar, tanto como mi esposo, como padre de sus hijos. Es impresionante el desapego.

No lo culpo...me culpo yo misma. Por no tener los cojones de marcar los límites como corresponden. Soy una loca, bipolar y estúpida.

Ni tan ruda
Ni tan valiente
Ni tan digna

domingo, noviembre 04, 2018

Ayuda¡¡

Una de las cosas más complicadas con la que he tenido que luchar este tiempo es la necesidad de recibir ayuda de terceros. Siempre he tratado de ser una persona idependiente y autosuficiente por lo que me avergüenza tener que pedir ayuda.

Obviamente hoy en día  mi autoestima y mi ego se han visto afectados, como mujer no puedo decir que me siento muy apreciada que digamos y esto claramente tiene que ver con el proceso de divorcio que estoy viviendo, agregar a esto tener que aceptar que no puedo con todo, que necesito ayuda de muchos tipos y en muchos aspectos de mi vida ha sido  realmente difícil.

Lo primero que necesité fue poder llorar en el hombro de alguien, poder desahogar mi dolor en lágrimas...lágrimas que llegaron a convertirse en sollozos que duraban más de lo que esperaba. Generalmente estos episodios los viví en soledad y me dejaban emocional y físicamente agotada. Otros los viví con una amiga...de esos ángeles que Dios te manda para poder aplacar en algo el dolor. Sin embargo, este proceso es más largo de lo que pensé y finalmente opté por seguir mi proceso en soledad, para que molestar al resto con los problemas de uno. Creo que así como a mi no me gusta consolar, y que me encanta mi privacidad familiar, lo mismo debe pasarle al resto. Cada familia tiene su dinámica,  sus espacios y sus tiempos, encuentro completamente fuera de lugar llevar nuestros problemas a la casa de al lado, menos por un tiempo tan prolongado.

Después llegó la necesidad de controlar la ira, los pensamientos acerca de situaciones que podían llegar a afectar a mis seres queridos y que me instó a buscar ayuda profesional. No creas que no me siento patética llegando a estas instancias, pero creo que me han entregado una mirada objetiva de la situación y a entender que a veces lloramos y sufrimos sin lograr ver el vaso medio lleno....esto es lo difícil. Uno sólo ve a su familia destruida, o al menos el modelo de familia que teníamos idealizado, cuesta entender que la familia es quien quiere estar, quien quiere amar al otro, quien se queda a tu lado sin condiciones, sólo por el hecho de elegirte y así poder amarte cada día,  y eso, eso no necesariamente es padre-madre-hijos, existen miles de familias uniparentales y no por eso son menos familias o se aman menos que el resto.

Me costó muchísimo entender que uno no siempre es fuerte, a veces nos fallan las fuerzas y necesitamos a alguien a nuestro lado, y aunque duele saber que la persona que por años fue la responsable de cuidarte y en quien mas confiabas en el mundo te falla y por lo tanto no puedes apoyarte en ella, existen terceras personas que están ahí,  cuidándote,  consolándote, y preocupándose de cosas tan importantes como no dejar que pases tu primer cumpleaños sola, lamiendo tus heridas de guerra.

Siempre me ha gustado la soledad, y no hablo que me sobra mi núcleo familiar, es con ellos con quiero compartir mi espacio, mi refugio...nuestro refugio, donde somos nosotros, tal cual, donde nuestra esencia se percibe claramente y nos sirve de cable a tierra, pero cuesta, cuesta seguir viviendo prácticamente la misma rutina cuando uno de los participantes ya no quiere seguir ahí y simplemente decide abandonarte, aceptar eso, duele. Entender sus motivaciones, sus prioridades creo que aún no logro hacerlo 😖

En esto estoy, intentando de a poco encontrar un equilibrio, donde pueda dejar entrar a personas que quieren estar junto a mi, y poder volver a confiar esperando que no me fallen. Formando una red de apoyo que me sustente en un momento de necesidad. Se supone que debo aceptar que alguien simplemente porque me estima quiera ayudarme, o hacerme un regalo; generalmente creo que lo hacen por lástima....y ese sentimiento es el último que necesito sientan por mi. Entiendo que la situación es compleja, que no todos la vivimos igual, y a pesar de sentirme en general tranquila con lo que hago la vergüenza y humillación son sentimientos que me acompañan y esto estoy trabajando, no tengo necesidad de victimizarme, como toda mujer soy capaz de criar a mis hijos sin su padre, lo que no significa que sea sola, y mucho menos de avergonzarme por no ser suficiente para alguien que no te eligió,  independiente las razones. Y humillación...no sé creo que va relacionado con la falta de respeto que he sentido en público,  pero que cada vez es menor, a medida que los sentimientos cambian.

En este momento me siento como en la cuerda floja, con dos hijos en brazos, a 20 metros del suelo y sin red de seguridad....dicen que la práctica hace al maestro, así que de aquí a 10 meses más seré una experta.

😎

sábado, noviembre 03, 2018

Escúchate y no te mientas

Uno puede procesar lo que ocurre en la vida de muchas maneras, pero hace unos días me ocurrió algo que me sorprendió.

Dicen que ojos que no ven corazón que no siente, y en parte es cierto, pero y si uno SABE aunque no haya visto? El problema con eso es nuestra imaginación...sobre todo si somos mujeres.

Ver imágenes de lo que pasa te obliga a entender q no es tu imaginación que te juega una mala pasada...es más parece que te has vuelto demasiado perpicaz... Sino que es la realidad que te pega en la cara sin piedad, aún así cuando queremos nos hacemos los tontos.

A veces vamos tan rápido por la vida que no vemos o no detectamos cosas o situaciones por las que pasamos que a vista de un tercero son evidentes...típico la mujer que es engañada por el marido y ella no se da cuenta...¿o no quiere darse cuenta?, otro caso es dar por hecho que tu pareja te acompaña y va a la par contigo en todos los proyectos....pero no siempre es así ¿o no? Justificar las faltas o las ausencias sólo nos lleva a vivir engañados y lo peor es que no nos engaña otra persona...lo hacemos nosotros mismos.

Ayer hablaba con alguien y relaté algunas situaciones que consideraba relevantes pero que no le había tomado el peso de lo graves que habían sido... esto me puso en una posición como si estuviera escuchando a una amiga mientras me digo internamente que inocente que es¡¡¡¡ cómo no ve lo q es evidente¡¡¡¡

Nos cegamos... justificamos por miedo a que duela más de lo que ya ha dolido... pasamos por alto errores por no generar conflicto, sin recordar que lo primero y básico en nuestro bienestar emocional es ser sinceros con nosotros mismos.

Decir "Oye...yo no estoy para estas tonteras", "No tengo tiempo para perderlo en boludeces...o con un@ imbécil", no me puedo mentir a mi misma, no me puedo hacer la tonta cuando las cosas son evidentes. No creas todo lo que piensas, busca ser objetiva, realista y concreta...los hechos dicen más que las palabras.

Pensar... sentir... Ver...creer... entender...OIR y reaccionar

Es extraño, pero oír lo que yo misma decía...me hizo preguntarme ¿Y qué miercale estás esperando? ¿qué te falta?  La verdad es que nada.... es más fácil y simple a corto plazo ser ciega y sorda que aceptar la realidad. Pero cuando la aceptamos, crecemos como personas...como mujeres, como madres... ya curtidas por el dolor, más sabias por la experiencia y más preparadas para disfrutar de las pequeñas cosas.

Todo te aporta...nada te resta, sólo depende de cómo lo administres.

🙋‍♀️

En medio del proceso

Desde hace 1 año y medio estoy separada del que fue mi esposo durante 11 años...considerando nuestro noviazgo fueron más de 20 años juntos. Estos 20 años dejaron 2 hijos hermosos que son la fuente de mis mayores alegrías.

No vale la pena contar detalles ni razones de esta separación, ya en sí ha sido demasiado complicada y dura para todos.

Han sido varias etapas de este proceso...la primera fue dolor, ese dolor en el que sólo quieres estar en posición fetal para ver si esa sensación que te nace desde el estómago, el corazón o la garganta...ya ni sé....para ver si ese dolor se pasa y cerrar los ojos para que cuando los abras puedas decir "fue sólo una pesadilla"...pero eso no ocurre.

En esta etapa uno busca culpables, motivaciones y responsabilidades, fuerza las cosas y se niega a mirar lo que hay detrás...quiere retomar el matrimonio quebrado, no sé porqué,  a lo mejor para intentar hacer como si nada hubiese pasado...pero pasó y tu corazón lo sabe...lo siente. En mi caso yo tengo claro el porqué y quien es responsable de lo que ocurrió y ya no sirve analizarlo...ya es tarde. Pero esto me permite en parte entender las motivaciones el por qué.?

Después uno pasa por la etapa de la rabia; ese minuto en el que traemos a palestra los errores del otro y restregamos en su cara las consecuencias de lo ocurrido...para qué, tampoco lo sé, después de muchos meses en este proceso supongo que es primero para ver si la otra parte reacciona o para hacerla sentir más culpable de lo que ya se siente.
Esta es la etapa en que más se daña la relación...las palabras hieren mucho más que los actos y al igual que ellos siempre quedan presentes y tienen consecuencias. El asunto es que en este tiempo es muy difícil razonar...la rabia es instintiva, animal, creo que viene de nuestro sentido de preservación que nace al sentirnos heridos y/o amenazados.

En este minuto comenzó mi tiempo de duelo. Este nace a raíz de muchos intentos infructuosos de reconciliación, nace de ver, oír y sentir muchas cosas,  más de las que uno puede procesar o aceptar...Aquí sentí un dolor como de muerte, ese dolor que sólo antes sentí ante la muerte de una mujer muy importante en mi vida. Creo que pasé  de tener un dolor con esperanza a un dolor sin ninguna esperanza. Es un dolor que te entristecerá cada vez que lo recuerdes, porque te marca...te daña, y esto es necesario para comenzar a vivir el duelo de una separación. Aceptar este proceso fue lo más difícil.

No podría decirles que mi duelo terminó y que el ciclo se cerró, claro que no, ya ni siquiera sé porqué, ni tampoco podría decirles lo que siento por mi ex-esposo porqué no tengo idea. Es extraño pero es así de simple. Sólo estoy segura que a pesar de todo el daño ocasionado en la familia, en mi y sobre todo en nuestros hijos es imposible odiarlo porqué creo que finalmente esto ocurre porque quizo ser de una vez por todas sincero con nosotros y consigo mismo. Y a pesar que las mujeres actuaríamos de una manera diferente es preferible una separación a un matrimonio en el que no eres feliz por no amar a tu pareja.

Ruego cada día por no sentir lo que siento, ni tener que pasar por este proceso, sin embargo estoy convencida que todo este tiempo de dolor y cada lagrima que uno derrama trae como consecuencia una gran recompensa, y es imposible recibirla sin pasar por el desierto.

Hoy en día sólo cuento los días para poder tramitar el divorcio...me quedan 10 largos meses, pero es el mejor regalo que puedo darle a mi ex, y aunque es extraño y doloroso decirlo, creo que es la mejor opción para todos.