Trabajo...

Nadie ha dicho nunca que la vida es fácil, siempre hay algo que solucionar o decidir, no ha sido un tiempo muy fácil que digamos, pero tener gente a nuestro alrededor que se preocupa por uno, que ora y que busca los medios para ayudarte, no para solucionarte el problema, sino que enseñarnos a solucionar esa clase de problemas, es alentador, nos permite ver, bueno, al menos a mí, que somos importantes, que Dios se preocupa constantemente de nosotros.

Mi matrimonio es lo mejor que me a pasado, mi marido es lo mejor, ahí aparece en Viña del Mar dibujándome un corazón...es más tierno él, por mí pasara siempre a su lado, queriéndolo y dejándome querer...obvio.

Ha sido un tiempo de oración matrimonial, es genial ver como a través de esto Dios nos ha bendecido, nos ha unido y fortalecido nuestro amor. Espero que esto nunca se acabe, busco eso, vivr siempre en este amor. No es que sea un amor romántico como de película, pero es un amor que no había vivido antes, y me encanta, es uno de los sentimientos que me sostiene y me hace sumamente feliz.

El fin de semana conversaba con alguien por ahí de los beneficios que casarse trae para el hombre, tiene alguien que le prepare el almuerzo, que duerma con él, que lo abrace cuando lo necesita, que le planche, le lavé, la haga la cama, le lave los calzoncillos, lo cuide cuando está enfermo, etc., etc., etc. y qué se supone que ganamos las mujeres? trabajo y más trabajo...jajaja...mñas de alguno(a) sabe de quien son esas palabras. Igual no puedo negar que el trabajao ahora es el doble, no porque mi marido me de pega, sino que yo soy su cara visible en el hogar, no quiero que nadie diga que anda sucio, que está flaco, que no anda perfumado o que se casó con una mujer que ni lo atiende, supongo que es una presión social que uno está dispuesta a asumir cuando se casa. Como son amigos con mi hermanito, ahora lavo y plancho el doble (_ _ _ _, ya poh, cuando se van a casar?? digo para que le laves y le planches a mi hermano...), se compran ropa igual y se me confunden los calcetines, así que ambos me reclaman, aunque me da la impresión que Jaime siempre sale ganando.

De todas maneras, el tener más trabajo si se siente físicamente, emocionalmente no pasa lo mismo, es como cada vez que hago algo por mi amor me siento más orgullosa o no sé que será, es raro, no me gusta planchar pero me gusta saber que si anda con una camisa bien planchada en la iglesia todo el mundo sepa que fui yo...su esposa...quien se la planchó...supongo que con10 años de matrimonio se me irá a pasar esa inspiración. Su amor me sustenta....

Lo único que me queda por decir por hoy es que me hace muy feliz, y que me quedan muchas cosas por aprender para hacer en mi matrimonio...es algo en lo que tengo, o tenemos, que trabajar.

Nos vemos

Un beso

MaJo